NOTA DE PRENSA N°388
Implementan política “Cárceles seguras” en recintos más poblado del país
PRESIDENTE DEL INPE REALIZÓ INSPECCIÓN EN PENAL DE LURIGANCHO Y MIGUEL CASTRO CASTRO
Con un mensaje claro y firme ante internos de los penales Lurigancho y Miguel Castro Castro, el presidente del Instituto Nacional Penitenciario (INPE), Carlos Romero Rivera, anunció la implementación de la política “Cárceles seguras” como una medida que reforzará la seguridad ciudadana a favor de la población y combatirá la generación de crímenes desde los penales.
A menos de un mes de tomar su lugar en el INPE, Carlos Romero indicó que en su gestión los penales de mayor población penitenciaria tendrán la oportunidad de rehabilitarse a través de la política “Cárceles productivas” con la cual podrán trabajar de la mano de los empresarios y percibir ingresos para sostener a sus familias.
Sin embargo, fue muy enfático al anunciar que la dirección de estos dos penales tomarán las medidas más drásticas, como el traslado de cabecillas a recintos de máxima seguridad o de reclusos que persistan en el delito.
Según el funcionario, el orden y la disciplina deben imperar en los centros de reclusión, por lo tanto no se permitirán actos que violenten las normas internas de seguridad.
Se ha dispuesto una renovación del equipo tecnológico de estos dos recintos, a fin de mejorar los sistemas de seguridad que implican la instalación de máquinas de rayos X para la revisión de paquetes, bodyscan para la revisión corporal, así como sensores de metal tales como arcos o paletas manuales.
Del mismo modo, el Grupo de Operaciones Especiales (GOES), tiene la consigna de reforzar el trabajo de seguridad de los equipos intramuros asignados en estos centros de reclusión.
Hace menos de un mes, en el penal Miguel Castro Castro el personal del INPE relevó a sus similares de la Policía Nacional en el servicio de seguridad externa, liberando aproximadamente 30 efectivos de estas funciones quienes volverán a las calles para combatir la delincuencia.
El INPE continuará con los operativos inopinados en la misma puerta de ingreso, interviniendo a las visitas que muchas veces se ven implicadas en el ingreso de artículos prohibidos tales como licor, drogas, armas y otros penados por ley.
Para Carlos Romero el mensaje a transmitir es que las cárceles sean lugares donde el trabajo, la seguridad y sobre todo la dignidad de las personas, sean la trilogía que apuntala la resocialización de los privados de libertad.
Con la política “Cárceles seguras”, el INPE brindará un gran aporte a la sociedad en el tema de la seguridad ciudadana.
Lima, 10 de octubre de 2018